¡Ya huele a Navidad! Si, ya sé que es un poco pronto pero ya queda menos de un mes para el gran día, pero ¿qué hay de malo en disfrutar de los días previos? La gente de mi alrededor piensa que soy una “freak” de estas fiestas, pero que le voy a hacer. ¡Me encantan!
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| Gran Vía desde Moyua, Bilbao |
Cuando se acerca el mes de diciembre y se empiezan a ver los preparativos, algo se despierta en mi interior. Esa niña pequeña que llevo dentro enloquece paseando bajo las luces, sin importar ni el frío ni la lluvia. La gente entra y sale de los comercios buscando un regalo especial para sus seres queridos y los niños pequeños contando los días para que ya sea Papá Noel, Santa Claus o el Olentzero les dejen sus juguetes favoritos bajo el árbol. Es una época mágica.
Se que suena cursi, pero en esta época me transformo completamente y la ilusión es el sentimiento que se apodera de mi.
Este fin de semana tengo la suerte de poder viajar a Múnich. Desde hace 8 años, procuro no perderme mi escapadita anual a las germanias, y siempre que puedo, intento que coincida con alguno de los días de adviento. La forma que tienen los alemanes de vivir esos días previos es realmente espectacular. ¿Qué me decís de sus famosos mercados navideños (Weinachtsmarkt o Christkindlmarkt)?
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| Uno de los múltiples mercados que inundan la ciudad de Múnich |
Espero poder tener la suerte de acercarme de nuevo al de Núremberg (una ciudad que me trae muy buenos recuerdos y donde pasé uno de los mejores años de mi vida. Una experiencia difícil de olvidar) y que tiene uno de los mercados más famosos. Tomarme el típico Glühwein (vino caliente con especias) y unos Waffeln mit Puderzucker (Gofres finitos con azúcar glasé), todo para entrar en calor bajo el frío invernal de la capital bávara. Lástima que no esté pronosticada la nieve, porque completaría la estampa perfecta.
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| Mercado de Nürnberg |
Bueno, con muchísimas ganas de que llegue el finde, me despido hasta después de la escapada.
¡Saludos!
R.
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